Manualidades de Halloween para niños
martes, octubre 28, 2014
Antes de comenzar hablando de las manualidades en sí, me gustaría hablar un momento sobre mi.
Los que no me conocéis no sabéis a que me dedico. Pues bien, tengo la gran suerte de ser maestra. Y digo suerte, no solo por las vacaciones (como odiamos los de mi gremio que nos repitan esto una y otra vez) sino porque es un trabajo en el cual puedes desarrollar tu faceta más creativa. Además soy maestra de inglés por lo que Halloween es, en mi caso, casi obligatorio celebrarlo. Entre esto y que cualquier excusa es buena para hacer una fiesta, me declaro: Halloween lover!
Al lío, todos los años preparo varias actividades sobre esta festividad para mis alumn@s y en ellas siempre incluyo alguna manualidad. Estas son las que hicimos el año pasado:
Evidentemente, las ideas no son mías del todo. Ya he confesado en entradas anteriores que Pinterest es una fuente de inspiración casi inagotable. Si os interesan las actividades de DIY y todavía no tenéis una cuenta, os animo a que echéis un vistazo.
Como podéis ver en la fotografía, no puedo evitar incluir tarjetas puesto que me considero aficionada al scrapbooking. Sin embargo, la manualidad que me gustaría explicaros es la de los portavelas.
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Yo la hice con niños de entre 8 y 10 años, pero se puede hacer con niños más pequeños si se les guía un poquito más. Si os fijáis, no puse velas dentro porque fuego y niños puede no ser una buena combinación. En su lugar, usé unas luces de navidad blancas.
El material necesario es bastante común por lo que no tendréis problemas. Necesitas:
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- un frasco de cristal limpio
- papel de seda (blanco, naranja, verde o morado, depende del personaje que quieras hacer)
- cola de carpintero
- pincel
- rotulador negro permanente de grosor mediano o fino
- rafia
En primer lugar, debemos rasgar el papel de seda en tiras (esto les encanta especialmente a los más pequeños) no demasiado estrechas, unos 2 ó 3 cm de ancho, el largo depende del frasco vayáis a cubrir.
Después, preparamos una mezcla de agua con cola. No os paséis con el agua porque el papel es muy delicado.
Con el pincel ponemos la cola sobre el frasco y vamos poniendo las tiras hasta que lo cubramos completamente. Damos, con mucho cuidado para que no se rompa el papel, otra capa de cola por todo el frasco. Esto es mejor hacerlo a toquecitos que arrastrando. Y ahora, lo dejamos secar ¡divina paciencia!
Cuando el secado ha finalizado, dibujamos el rostro de nuestro monstruo con un rotulador negro permanente y decoramos la parte de arriba con la rafia. ¡Listo! Sencillo y resultón.
Espero que os guste y si lo hacéis me hagáis llegar una foto, me haría mucha ilusión.
¡Hasta la próxima!
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